Un estudio realizado por la bióloga dominicana Ángela Guerrero revela que el anís estrella endémico de la República Dominicana, conocido científicamente como Illicium ekmani, posee una gran diversidad de compuestos químicos con potencial de uso farmacéutico. Sin embargo, la especie se encuentra amenazada.
En la conferencia titulada: “Illicium ekmani: Distribución y conservación en la República Dominicana, resultados preliminares”, se identificaron cinco grupos de poblaciones con una composición diversa de aceites esenciales y componentes aromáticos.
El anís estrella habita en los bosques ombrófilos y nublados, tanto de la cordillera Central como en la cordillera Septentrional.
La mayor población de anís estrella fue identificada en Loma Miranda, la “zona modelo” para el estudio. El Illicum de esta población posee más de 60 compuestos y su compleja composición química le permite defenderse de los insectos y adaptarse mejor a los cambios ambientales, según la experta, docente de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).
- “Hay que ubicarlos y hay que conservarlos, porque si no, no vamos a tener ningún beneficio“, afirmó.
En la investigación, realizada por Guerrero junto con Morgan Bida, Laura Tejada, Natalia Ruíz Vargas e Iris Marcano, se expone que los estudios bioquímicos de los aceites esenciales y compuestos volátiles del Illicium ekmani tienen potencial antioxidante, antiinflamatorio, antidiabético, fungicida, antibacterial e insecticida.
“Los terpenos, compuestos químicos presentes en la planta, son muy diversos. Uno de sus derivados son las lactonas sesquiterpénicas. El doctor Quirico Castillo, de la Facultad de Ciencias (de la UASD), ha descubierto varias moléculas de este tipo en otras plantas de la familia del girasol, con resultados prometedores en líneas de células anticancerígenas”.