En la vivienda donde estaba el cuerpo de Joneivi Núñez, de 32, Noticias SIN tuvo acceso, a la habitación donde permaneció junto al ataúd, pero la familia no toca el lugar afirmando que el joven va a resucitar.

La tía de fallecido, Dinorah García, dijo que “nosotros no sabemos porque ellos entraron así, ahí no había nada, nunca hubo mal olor”.

Ahora los familiares del difunto se preguntan dónde fue llevado por las autoridades, por lo que Dinorah García, pastora de la iglesia protestante la Gran Jerusalén Primera en el sector Valiente Tercero, convocó a una vigilia por el alma del que también era su sobrino.

Dinorah expuso que “nosotros vamos a orar para que Dios tenga piedad de todos, son unos pecadores”.

Por varios días las autoridades trataron de que la familia accediera de manera voluntaria a sepulturas el cadáver, pero ante la negativa y el clamor de la comunidad se vieron obligados a usar los medios para llevarlo a la sede del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) desde donde se dice será sepultado.

Por otro lado, algunos vecinos alegan que “ese hombre estaba podrió”.

Eso ocurre mientras los familiares mantienen su posición de que no estaba muerto, pero los vecinos aseguran que ya el cuerpo estaba en estado de descomposición cuando las autoridades lo levantaron.

Con la finalidad de evitar insalubridad y que se genere un brote de enfermedades en la zona donde se encontraba el cadáver, los vecinos piden a Salud Pública realizar jornadas de fumigación.

“Yo quiero que venga salud pública a fumigar a inyectar los niños, esto por aquí está contaminado, eso ahí está lleno de bacterias”, sostiene Casio Sambroice, vecino del fallecido.

El occiso murió a causa de un edema pulmonar en un centro médico de la capital.