El director del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), Juan Manuel Méndez, confirmó ayer en la tarde la cifra de once muertos producto de la explosión que se registró el lunes en un establecimiento comercial en San Cristóbal y anunció que habían encontrado varios cadáveres más en el área de desastre.

Durante la rueda de prensa del boletín número dos desde el hospital Juan Pablo Pina, en el municipio de San Cristóbal, el funcionario explicó que el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) trabaja en la identificación de los cuerpos. También en determinar la cantidad exacta.

“Están trabajando en la identificación de dos o tres cadáveres (…) encontraron más cadáveres”, acotó.

Méndez aclaró que no podía especificar la cantidad de muertes porque se estaban analizando restos que debían identificarse antes de poder llegar a una conclusión.

La explosión, que ocurrió pasadas las 3:00 de la tarde del lunes, dejó nueve edificaciones afectadas, cuatro parcialmente destruidas y 59 heridos, algunos de los cuales recibieron asistencia en distintos centros de salud y fueron despachados. Otros permanecen hospitalizados en la unidad de quemados que funciona en el hospital Ney Arias Lora en Santo Domingo Norte.

Con relación a las labores de sofocación del incendio, el director del COE dijo que “los Cuerpos de Bomberos se encuentran realizando labores de extinción de incendios, así como remoción de escombros y enfriamientos”. Sin embargo, en horas de la noche, el fuego se reavivó en la tienda Toledo.

Agregó que la Defensa Civil se encontraba apoyando las labores de remoción de escombros y recuperación de cadáveres.

También trabajan equipos del Ministerio de Obras Públicas, el Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa) y la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD).

Desaparecidos

La desesperación invade a los familiares de decenas de personas que se encontraban en los comercios convertidos en escombros luego de la gran explosión.

Pasadas más de 24 horas del siniestro, las cifras oficiales ofrecidas establecían diez desaparecidos. 

Los desaparecidos han sido identificados.

En las redes sociales se vio una camioneta blanca estacionada en la zona del incendio, en ella se transportaban tres personas: los adultos Luz Esther Mateo Germán y Ángel Luis Uribe y la niña de siete años Paulette Brea, quienes salieron a comprar materiales en DT Ferretería, convertida hoy en escombros. De acuerdo a informaciones recabadas por Diario Libre, la pareja de esposos cuidaba a la menor mientras su madre trabajaba. El vehículo fue visto totalmente destruido y se desconoce el paradero de estas personas. 

Karina Heredia Pérez, de 28 años, trabaja como contadora de la tienda de textiles Toledo en horario de 8:00 a.m. a 6:00 p.m. Este negocio quedó destruido. Heredia Pérez se encontraba en el establecimiento cuando ocurrió la tragedia. 

Rafael Solano, de 60 años, es un ebanista residente en el sector Lavapies. Ayer acudió con su ayudante Darío Cuevas Cuevas en busca de unas telas en la tienda Toledo. 

La joven Anairis Cruceta continúa desaparecida.

El señor Héctor Ramírez Cuello, de 60 años, realizaba sus acostumbrados trabajos como mecánico en la zona. Estaba solo, sus familiares sospechan que el fuego pudo haberlo alcanzado porque estaba justo al frente de los negocios afectados por la explosión.

Diario Libre entrevistó a dos personas que se presentaron esta mañana en el hospital Ney Arias Lora con la esperanza de dar con sus familiares.

Indicaron que el ebanista Víctor Manuel Hernández, de 27 años, llegó a la tienda de textiles a bordo de un motoconcho.

También del motorista Santo Emmanuel de Jesús, de 59 años, se desconoce su paradero desde la explosión.

Piden sangre

El Hemocentro Nacional está recibiendo donaciones de sangre para dar respuesta a las solicitudes del líquido y plasma que están requiriendo los heridos por la explosión.

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