Hace dos décadas, un 14 de febrero de 2005, apareció en internet una nueva plataforma llamada YouTube con el objetivo de que la gente corriente la usara para compartir sus videos caseros, pero ni en los sueños más ambiciosos sus creadores hubiesen podido imaginar que la plataforma revolucionaría tanto el sector audiovisual como el del entretenimiento.
Los nombres detrás de este concepto son los de Steve Chen, Chad Hurley y Jawed Karim, tres exempleados de la empresa estadounidense de comercio electrónico PayPal.
El primer video fue un elefante en el zoo
El protagonista del primer video de la plataforma, ‘Me at the Zoo’ (Yo en el zoológico) fue Karim; en un clip de menos de 20 segundos se ve al entonces veinteañero frente a la jaula de elefantes del zoológico de San Diego, California.
“Lo bueno (de los elefantes) es que tienen una trompa muy, muy, muy larga. Eso es genial, y eso es prácticamente todo lo que tengo que decir”, explica Karim en su video, que fue subido el 23 de abril de 2005 y cuenta ahora con más de 348 millones de reproducciones.
Youtuber, una profesión
Donaldson dijo a la revista Time en 2024 que su canal genera entre 600 y 700 millones de dólares al año. “Cada video genera un par de millones en ingresos por publicidad, un par de millones en acuerdos con marcas”, aseguró el youtuber.
Pese a que las cuentas mundialmente más conocidas suelen ser estadounidenses, India también tiene mucho peso en la plataforma. El segundo canal con más suscriptores -286 millones- es T-Series, que es una compañía discográfica y productora cinematográfica de ese país.
Los nuevos rivales
- El líder de búsquedas en internet, Google, compró la startup YouTube por 1.650 millones de dólares, en 2006. Entonces, la plataforma aún no era rentable y aquella compra fue la más cara de Google en sus primeros ocho años de historia.
- “Este es el siguiente paso en la evolución de internet”, dijo tras la operación el entonces director ejecutivo de Google, Eric Schmidt.
- Desde ese momento han surgido nuevas plataformas que le hacen cada vez más sombra a YouTube, como la de streaming Twitch -que pertenece al gigante Amazon- o las redes sociales Instagram -ahora propiedad de Meta- y TikTok -de la china ByteDance, cuyo futuro en EE.UU. es incierto-.