Cabrera, María Trinidad Sánchez.-De ser un paraíso de variada vegetación, producción agrícola y ganadera, El Brocal, comunidad ubicada en el corazón de la loma de Caño Azul, en Cabrera, provincia María Trinidad Sánchez, pasó a ser un foco de contaminación.

Esto porque dos empresas están explotando caliche, sin ningún tipo de remediación ambiental, generación de empleo en el lugar ni reparación de la carretera.

La explotación minera, más que ser un desarrollo para la comunidad, se ha convertido en un desafío sanitario y de comunicación terrestre para sus residentes.

De acuerdo a la Junta de Vecinos del lugar llevan más de dos años solicitando a los inversionistas que den mantenimiento a la calle, pero las peticiones han sido nulas.

La situación empeora cada día por el trasiego de vehículos pesados que dañan las calles del lugar, al punto que los comunitarios para poder trasladarse a sus trabajos, vender sus producción y realizar las tareas cotidianas, han tenido que reparar las vías con sus propios recursos, lamenta Bernardo Calderón, miembro de a Junta de Vecinos.

Similar queja tiene Élida Villa, que cuenta que hace menos de cuatro años invirtieron más de 300 mil pesos para adecuar las calles para que fueran incluidas en el programa de asfalto de 2019, pero ese dinero se perdió .

“Ahora esperamos sólo la disposición del Gobierno en cambiar la situación, ya que hemos acudido a la gobernación, pero ha sido imposible, ya que el propietario de una de las minas es su esposo, y hacen caso omiso”, indicó.

Problemas de salud

— Mal estado
Los moradores del sector lamentan que ahora los casos de gripe y enfermedades pulmonares se han incrementado en la comunidad, por lo que llaman a las autoridades a tomar carta en la situación.