Finalizó sin acuerdo otra reunión entre las autoridades de República Dominicana y Haití para reabrir la frontera y solucionar en impasse que originó la construcción de un canal para desviar hacia territorio haitiano aguas del río Masacre.
Durante la reunión las autoridades haitianas exigieron peticiones que no estaban al alcance de las autoridades de la provincia de Dajabón.
Desde el cierre de la frontera, cientos de haitianos han retornado a su país, por lo que las autoridades de Juana Méndez han dejado una puerta abierta sobre el puente fronterizo para permitir la entrada de sus compatriotas.
El gobierno dominicano dispuso el cierre de la frontera para presionar a Haití a que detenga la excavación del canal para desviar el cauce del Masacre, que divide a ambas naciones.
Los haitianos consideran que la construcción del canal es legal y necesaria para irrigar la tierra con vocación agrícola en la línea limítrofe.