Shohei Ohtani se consagró el jueves como el primer pelotero en conseguir 50 jonrones y 50 robos en una misma campaña, al brindar la actuación más espectacular de su carrera, con dos vuelacercas y un par de hurtos en la paliza que los Dodgers de Los Ángeles propinaron a los Marlins de Miami, por 20-4.
El astro japonés se convirtió además en el primer jugador con tres cuadrangulares y dos robos en un mismo duelo. Por si fuera poco, pegó un par de dobletes, logró la mejor cifra de su carrera con seis imparables y estableció una marca de los Dodgers con 10 impulsadas.
Sus 51 vuelacercas en la presente campaña quebraron el récord de la franquicia, que era de 49 y fue establecido por Shawn Green en 2001.
Ohtani comenzó la jornada a dos jonrones y una estafa del club inédito de los 50/50. Como aperitivo, conectó un doblete en el primer turno del duelo frente al dominicano Edward Cabrera (4-8) y se robó la tercera almohadilla para llegar al medio centenar de hurtos.
Fue parte de un doble robo, junto con Freddie Freeman, quien se embasó con un boleto.
Ohtani se robó su 51ra base en la segunda entrada. Ha tenido éxito en sus últimos 28 intentos de robo.
Su 49no jonrón llegó en el sexto capítulo, al encontrar un slider del dominicano George Soriano, con cuenta de 1-1, y catapultar la pelota a 438 pies del plato, para depositarla en el segundo piso del graderío entre el prado derecho y el central.
Ese garrotazo colocó a los Dodgers arriba por 9-3.
En la séptima entrada, Ohtani logró el batazo histórico, al jardín izquierdo para remolcar dos carreras ante el relevista Mike Baumann.
Los Dodgers se arremolinaron para felicitar al portentoso pelotero cuando llegó a la cueva. Los 15.548 aficionados comenzaron a corear el nombre del astro visitante hasta que salió del dugout para recibir una ovación.
Y en el noveno capítulo, hizo que la pelota viajara 440 pies entre el bosque derecho y el central para producir tres carreras ante el dominicano Vidal Bruján, quien se desempeña habitualmente como intermedista pero subió al montículo como solución desesperada en medio de la paliza.
La jornada histórica de Ohtani casi incluyó el ciclo. Fue retirado en tercera cuando intentó convertir su segundo doble en un triple. Los Dodgers aseguraron su duodécimo boleto de playoffs en forma consecutiva, y redujeron a seis su “número mágico” para obtener el título divisional.