El llamado rey de la selva tiene un día especial y se celebra cada 10 de agosto. La finalidad es concientizar a la población sobre el riesgo que corren estos animales en peligro de extinción.

Este día fue declarado en 2013 por Derek y Beverly Joubert, una pareja de esposos que se habían aliado con National Geographic para crear la iniciativa de los grandes felinos. Este proyecto también se centra en orientar a la población sobre la disminución de la población de estos animales.

El portal World Animal Protection advierte que la cantidad de leones en ambientes naturales ha descendido considerablemente y la tendencia continua. Tanto así, que la población de leones en África, por ejemplo, ha disminuido en un 41 % desde 2001.

Según la referida página, para proteger a estos felinos es necesario abogar por el fin de su explotación comercial y eliminar la demanda de leones en actividades turísticas de entretenimiento. De igual forma, incentivar a los gobiernos a desinsentivar el uso de los leones en la medicina tradicional.

Los leones tienen habilidades únicas, como la capacidad de resolver acertijos para obtener comida. De igual forma, pueden aprender a resolver acertijos al observar a otro león hacerlo primero

Estos felinos son animales cautos y silvestres y no deberían ser domesticados, pues sus necesidades emocionales y sociales solamente pueden ser satisfechas viviendo en manada con sus pares.  

Los leones se consideran “vulnerables“, pues en libertad, solo existen cerca de 20,000 viviendo en África. Históricamente sus pieles han sido muy atractivas por la industria de la moda, por lo que son cazados y capturados también para actividades humanas. Además, son usados como entretenimiento y medicina tradicional.

En las llamadas “experiencias de caza”, algunos leones en cautiverio son puestos en espacios delimitados para que cazadores, puedan disparar en el blanco y mostrar al león muerto como trofeo. En estos escenarios, algunos de estos felinos sufren heridas dolorosas.