A ritmo de la salsa “Nadie es eterno”, fueron sepultados la tarde de este lunes los restos de la comunicadora Chantal Jiménez, quien fue asesinada el pasado Sábado Santo por su expareja. Éste, luego de cometer el hecho, se suicidó.

Con la promesa de cuidar a su hermano menor, una de las hermanas de la joven se aferraba al féretro para impedir que fuera depositado en el lugar que ahora será su última morada.

Mientras los familiares de la comunicadora prefirieron guardar silencio ante los miembros de la prensa, la ministra de la Mujer, Mayra Jiménez, en visita a la funeraria Espíritu de Dios, en la calle Josefa Brea, Distrito Nacional, exigió una investigación exhaustiva para determinar si hubo negligencia por parte de las autoridades.

“Se conoce la información que hubo a nivel de opinión pública de que tres días antes de cumplir el hecho, (su expareja) había intentado contra su vida; justamente por eso estamos siendo enfáticos en una investigación exhaustiva y, de comprobarse negligencia, que haya el debido régimen de consecuencia”, expresó la ministra al ser cuestionada sobre si hubo negligencia por parte de las autoridades. 

Asimismo, abogó para que las instituciones jueguen el rol que les corresponde cuando existen denuncias sobre violencia de género e intrafamiliar, a los fines de evitar muertes por feminicidios. 

La comunicadora Chantal Jiménez, de 25 años, fue asesinada de un disparo en la cabeza por su expareja, Jensy Graciano Cepeda, en la urbanización Fernández, del Distrito Nacional. El victimario se quitó la vida tras cometer el hecho.